Maletas perdidas en un aeropuerto

La respuesta es compleja y desalentadora. Uno de los grandes peligros de facturar nuestras maletas es el de que se pierdan y acaben en aeropuertos a miles de kilómetros de distancia de nuestro destino. Sabemos de historias de viajeros que reciben en compensación ‘kits de supervivencia’ aportados por aerolíneas, turistas que duermen con lo puesto ese par de días fatídicos. ¿Dónde van las maletas perdidas? No van al cielo, no. Al principio se quedan en los aeropuertos almacenadas de la siguiente forma como si fuera el limbo:

Maletas perdidas

 

En este fantástico artículo de Diario del viajero explican con detalle los motivos que llevan al extravío de esas maletas, las posibles soluciones y consejos a la hora de evitar estos riesgos. Según este artículo, se pierden 10.000 maletas al día en todos los vuelos mundiales. Si eso es cierto, hablamos de más de tres millones y medio al año, una cifra que asusta aunque proporcionalmente no sean tantos los pasajeros perjudicados.

Al cabo de unos meses, las maletas que no vuelven a su feliz propietario se donan a ONGs, se  subastan o se destruyen, depende del país donde se queden. Cuando se produce la pérdida hay que rellenar, en el mismo aeropuerto, un Parte de Irregularidad de Equipaje, un impreso que en otros países tiene un nombre similar. Si queremos denunciar, habría que seguir los pasos que recomiendan en este artículo de Concha Barón para Elle. Es muy importante reclamar y denunciar cuanto antes, que quede constancia escrita y firmada en el mismo momento en el que no aparece nuestro equipaje. Incluso aunque llegue finalmente a nuestras manos, si está dañado o ha llegado más tarde, hay que reclamar. En la página web de Aena se especifica así:

[…]
Con independencia de la cumplimentación del P.I.R. antes de abandonar el aeropuerto, usted dispone de los siguientes plazos para la presentación de reclamaciones:
  • En caso de avería, el pasajero deberá presentar al transportista una protesta inmediatamente después de haber notado el daño y, a más tardar, dentro de un plazo de siete días para el equipaje facturado a partir de la fecha de su recepción.
  • En caso de retraso, la protesta deberá hacerse, a más tardar, dentro de veintiún días a partir de la fecha en que el equipaje haya sido puesto a disposición del pasajero.
Toda reclamación deberá hacerse por escrito y ser entregada o expedida dentro de los plazos citados.
[…]

 

Una solución eficaz es enviar las maletas por mensajería privada. A este respecto, nosotros proponemos nuestra solución para que no resulte tan costoso. Es además una opción que están utilizando muchos hoteles para prestar servicio a sus clientes -de casa a la recepción de hotel y de ahí a casa, directamente-. Air Europa ha anunciado recientemente el desarrollo de un microchip que hará de documentación del equipaje para reducir ese número de maletas perdidas, pero incluso aunque se llegue a aplicar en un futuro, el riesgo sigue existiendo -si falla la pegatina de identificación, también puede fallar el chip-.

Por nuestra parte, a aquellos viajeros que opten por enviar sus maletas facturables por mensajería para evitar peligros, les recomendamos:

1. Cerrar la maleta con vehemencia. Si no tiene un candado integrado, ponedle uno pequeño.

2. Embalarla con filme transparente y refuerzos de cinta adhesiva.

3. Incluir etiquetas y pegatinas (varias) especificando el destino con claridad y en mayúsculas y algún dato de contacto del dueño (nombre, correo electrónico, teléfono). Por encima del embalaje y en el interior.

4. Disfrutar del vuelo sin cargar con peso y olvidándose de pasar por la cinta transportadora. ¡Feliz viaje!