En un mundo donde la globalización provoca que la competencia sea cada vez mayor, hay que estar preparado para tener clientes más allá de las propias fronteras. Si estáis pensando en vender vuestros productos fuera de España, un factor imprescindible que debéis de tener en cuenta, es la logística.
A continuación, os damos todas las claves sobre este tema:
1. Es fundamental una estrategia logística que permita reducir los gastos de envío y poder ofrecer unos precios competitivos. A través del buscador, podéis encontrar los mejores precios, para envíos nacionales e internacionales y además, si tenéis un volumen regular, podéis acceder a descuentos especiales.
2. Aduana: Si vais a vender vuestros productos en Canarias, Ceuta, Melilla o fuera de la Unión Europea, pueden existir gastos aduaneros a pasar por la frontera del país de destino. Esto puede suponer un freno para el comprador, ya que correrá a su cuenta, el abono de este importe.
3. Documentación: Una de las primeras preguntas a la hora de iniciar el proceso de exportación, es la de qué documentos se necesitan:
- DUA: Es un documento que se exige siempre en la aduana de salida donde se detallan las características del producto que se vende.
- Certificado de origen: Normalmente, se requiere a la hora de enviar alimentos o artículos sanitarios. Podéis conseguirlo en la Cámara de Comercio de vuestra ciudad.
- Licencia de Exportación: En ella se detallan características comerciales del producto y se usa cuando lo que se va a exportar, tiene limitaciones en el país de origen.
- Factura proforma: Es un documento similar a una factura comercial.
4. Artículos prohibidos: Existen ciertas restricciones para el envío de determinados artículos en algunos países, por eso, es muy importante conocer el listado completo de mercancías que no se pueden enviar, ya que puede que exista alguna complicación para vender vuestros productos en ese país concreto.
5. Embalaje: Y el último punto fundamental para que el envío viaje con total seguridad, es embalar adecuadamente la mercancía para que llegue en perfecto estado a su destino. Esto es muy importante, ya que se trata de un viaje largo y cualquier movimiento en el trayecto puede afectar al producto. Tened en cuenta que existen ciertos artículos, como los alimentos o las botellas de cristal, que necesitan unos requisitos especiales de embalaje.